El caso de los dos narcomenudistas detenidos el domingo en Santa Catarina –de los que uno fue hallado muerto el lunes y otro, que estaba herido, no aparecía– se complicó ayer todavía más cuando por la tarde este último fue reportado como localizado en casa de un familiar y, horas después, desapareció de nuevo junto con su mamá.
El individuo –que presuntamente estaba detenido– identificado como Marcelo Adrián Lucio Barajas, y no José Adrián como se identificó ante la Policía de Santa Catarina y la Policía Ministerial, fue encontrado ayer por la tarde por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en casa de unos familiares en la Colonia Fomerrey 29, en Santa Catarina.
Sin embargo, el Procurador de Justicia, Alejandro Garza y Garza, informó que al acudir más tarde la Ministerial a buscarlo en la casa donde fue localizado por la CEDH, en la vivienda sólo había un colchón abandonado y ya no localizaron a la mamá del presunto narcomenudista.
Lucio y José Humberto Márquez Compeán, de 26 años, fueron detenidos el domingo por policías de Santa Catarina como presuntos vendedores de drogas al menudeo, y cuando eran trasladados a la PGR, un comando intentó rescatarlos, acción en la que mataron a un policía y dos escoltas.
Lucio, herido, y Márquez, ileso, fueron subidos a un helicóptero de la Marina que los llevó al Hospital Universitario, donde supuestamente fueron dejados bajo la custodia del director de la Policía de Santa Catarina, Luis Eduardo Murrieta Maya.
Pero ni el herido ingresó al nosocomio, ni Márquez fue consignado a autoridad alguna.
El lunes, Márquez fue hallado muerto en un lote baldío de San Nicolás y de Lucio, ninguna autoridad pudo informar sobre su paradero.
Ayer, una fuente informó que familiares de Lucio acudieron a las 13:30 horas a las instalaciones de la CEDH para interponer una queja por su desaparición.
Cuando eran atendidos y estaba por iniciarse la diligencia, narró la fuente, los familiares recibieron una llamada a un celular en la que se les informaba que Lucio estaba en la casa de otro familiar en la Colonia Fomerrey 29, en Santa Catarina, sin que se revelara el sitio exacto.
El informante aseguró que personal de la CEDH acudió al domicilio y constató que Lucio estaba ahí y que ya había sido atendido de las heridas que presentaba, lo que fue reportado tanto a la CNDH como a la Procuraduría del Estado.
Sin embargo, cuando agentes ministeriales acudieron al domicilio, hallaron la vivienda prácticamente abandonada y ya no pudieron localizar ni a la madre de Lucio.
(Con información de El Norte de Monterrey)
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