Cazan a federales en el Estado de Mexico e Hidalgo

Cinco efectivos de Policías Federal fueron agredidos a balazos mientras se encontraban en un retén sobre el kilómetro 162 de la carretera México-Tulancingo, a la altura de la comunidad de San Antonio Ometuxco, en el municipio mexiquense de Axapusco; tres de ellos murieron, uno de los cuales era mujer y dos más resultaron heridos.

Los primeros reportes de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) indican que los efectivos le marcaron el alto a dos camionetas (una Murano y una Escape) que circulaban por esa vía, cerca de la intersección con la carretera Arco Norte, pero las unidades no se detuvieron.

Al intentar interceptar a los vehículos, de manera sorpresiva los individuos que viajaban al interior dispararon en contra de los policías federales, lo que provocó la muerte de dos elementos que sólo fueron identificados por los apellidos que portan en el uniforme, como Villarreal e Islas y de una mujer de nombre Nadia Astrid Canales Téllez, de la misma corporación.

Francisco Cano y otro elemento de apellido Rodríguez Varela resultaron heridos, por lo que fueron trasladados en helicópteros a hospitales para su atención. En el lugar quedaron las unidades de la Policía Federal 10121 y la 13532.

Luego del ataque, las fuerzas federales en coordinación con la ASE y efectivos municipales realizaron un operativo para encontrar a los responsables, pero hasta el cierre de la edición no habían sido ubicados.

Al respecto, la unidad de Comunicación Social de la PF guardo gran hermetismo para informar sobre los pormenores del incidente en el que perdieron la vida tres uniformados.

¿Otros tres federales muertos?

En información publicada en su portal de Internet, Milenio.com, informa de otra balacera, en el que habrían perdido la vida otros tres federales.

Según este diario, un grupo de sicarios mataron a tres policías federales e hirieron a cuatro más, luego de un enfrentamiento en el municipio Villas de Tezontepec, en Hidalgo.

De acuerdo con reportes policíacos, la balacera comenzó cuando policías federales detuvieron a un Jetta color rojo, para posteriormente detener a sus ocupantes. Al ver que los sujetos llevaban armas de alto poder en su vehículo, los uniformados pidieron apoyo.

Sin embargo, un grupo de sicarios, a bordo de varias unidades, arribó al lugar para tratar de rescatar a los detenidos.

El saldo preliminar del enfrentamiento es de tres policías federales muertos y cuatro más heridos.

Al parecer también hay dos detenidos, los cuales fueron llevados a las instalaciones de la Policía Federal de Pachuca.