Sergio Villareal Barragán, alias “El Grande”, quien después de la muerte de “El Barbas” había sido nombrado lugarteniente de la organización de los Beltrán Leyva, para contrarrestar las acciones de “La Barbie”, fue aprehendido por elementos de la Secretaría de Marina durante un operativo implementado en en el fraccionamiento de lujo Puerta de Hierro, de la ciudad de Puebla.
De acuerdo con información proporcionada por la dependencia, “El Grande” fue aprehendido, junto con otras dos personas, José Enrique Jurado Torres y Ramiro Cisneros Aguirre, alrededor de las 13:45 horas, en el domicilio marcado con el número 13 de la calle de Mercaderes, en la capital poblana, durante una acción en la que no hubo disparos, pese a que se requirió de la presencia de por lo menos 30 elementos de la Marina y un helicóptero.
Inicialmente se especuló que se trataba de una simple inspección, pero los hechos cobraron fuerza cuando se confirmó el decomiso de ocho vehículos de lujo, algunos de las marcas Mercedes Benz y BMW.
Vecinos del exclusivo complejo habitacional revelaron que sujetos vestidos de civiles ingresaron al lugar alrededor del medio día, incluso, dijeron, amedrentaron al vigilante de la caseta quien trabaja para la compañía de seguridad privada Le Blanc, para que les permitiera el acceso.
Posteriormente, se presume que 25 elementos la Policía Federal, varios más del Ejército y 28 de la Marina arribaron en vehículos para rodear la zona e impedir el paso en la avenida 15 de mayo, desde calle Fuente de Trevi y hasta Fuente de San Miguel.
La Guerra La Barbie-El Grande
Después de que Arturo Beltrán Leyva, El Barbas, fue abatido por la Marina en diciembre pasado, su hermano Héctor designó a El Grande como lugarteniente de la organización, según un informe de la Secretaría de la Defensa Nacional dado a conocer en junio de este año..
En ese informe se señala que Héctor, ahora líder del cártel de los Beltrán Leyva, culpó a Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, de traicionar a su hermano Arturo, al no rescatarlo de los elementos de la Marina, en Cuernavaca, Morelos, en diciembre pasado.
Cuando El Barbas lideró a los Beltrán Leyva, éste nombró a Sergio Villarreal Barragán y a Édgar Valdez Villarreal como sus lugartenientes, tras el rompimiento con el cártel de Sinaloa, luego de que El Barbas acusó a El Chapo Guzmán Loera de haber entregado a la policía, en enero de 2008, a su hermano Alfredo, El Mochomo.
La asociación de conveniencia entre los hermanos Beltrán Leyva y los Zetas —quienes eran el brazo armado del cártel del Golfo—, tras el rompimiento con El Chapo Guzmán, provocó que Édgar Valdez Villarreal mantuviera constantes “diferencias” con los Zetas, toda vez que La Barbie había sido contratado por el cártel de Sinaloa, trasladándolo desde Texas hasta Sinaloa, para combatirlos.
Así, en ausencia de El Barbas, y como líder su hermano Héctor, La Barbie decide disputarle el liderazgo de la organización, lo que da comienzo a una espiral de violencia “alarmante” –catalogada así por autoridades militares–, debido a la “sicosis social” generada en Morelos y Guerrero, al enfrentarse Valdez Villarreal contra Villarreal Barragán en asociación, en ese entonces, con los Zetas.
El informe de la Novena Región Militar mencionaba entonces la “probabilidad” de un incremento de la violencia al enfrentarse las tres organizaciones por las plazas, tras el rompimiento, de El Grande con Héctor Beltrán Leyva.
El Grande, también conocido como El Comeniños, tiene 41 años; es considerado por las autoridades mexicanas y de Estados Unidos como uno de los principales traficantes de droga, principalmente de cocaína, al dominar la ruta de la Comarca Lagunera en Durango y Coahuila, cuyos centros de operación son Torreón y Piedras Negras, para enviar el alcaloide a territorio estadunidense.
En la ficha criminal de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), de la Procuraduría General de la República (PGR), se precisa que en 1990 Villarreal Barragán perteneció a la Policía Judicial de Coahuila, dos años después ingresó a la PGR como policía judicial federal, adscrito a Nuevo Laredo.
La PGR también menciona que en 1993 El Grande es coptado por el cártel de Juárez para operar en el trasiego de droga en Durango y Coahuila; se integró al cártel de Sinaloa en 2001, cuando se establecieron alianzas estratégicas entre el grupo de Juárez con los de El Chapo, alianza que se fracturó tras la muerte de Rodolfo Carrillo Fuentes, al señalar a Guzmán Loera como autor de ese asesinato.
El Grande es un hombre que mide un metro con 97 centímetros, es de tez blanca, y está acusado de cometer 43 asesinatos.
La PGR ofrecía 30 millones de pesos a quien proporcionara información que ayudara a lograr su detención. Mientras que la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) ofrecía cinco millones de pesos.
Reportes oficiales lo consideran extremadamente peligroso y violento, además de que, se señala, buscaba apoderarse de las plazas de Morelos, Guerrero y Estado de México para el cártel de Sinaloa.
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