Y como ya se vuelve costumbre, dos nuevos acontecimientos nos dan cuenta de la violencia en Jalisco. Un hombre de 33 años fue asesinado de un tiro certero en el corazón, en Zapopan, mientras que en El Salto otro cuerpo fue encontrado sin vida, durante la madrugada de este martes y noche del lunes.
En el cruce de las calles Jade y Diamante, en la colonia Balcones de la Cantera, en el municipio de Zapopan, un hombre fue asesinado de un balazo en el pecho, a la altura del corazón, aparentemente por miembros de una pandilla denominada Los Molinos, los cuales pertenecen a otro rumbo de la ciudad.
A decir de las autoridades, un reporte ciudadano alertó a la policía municipal sobre detonaciones de arma de fuego en el citado lugar, por lo que uniformados salieron hacia esa zona, donde encontraron el cuerpo de esta persona, identificado como Alfredo Velázquez Hernández, de 33 años, alias “El Pollo” con un impacto de bala en el pecho, a la altura de la tetilla izquierda.
Los vecinos del lugar indicaron que al filo de las 00:00 horas de este martes escucharon al menos cuatro detonaciones de arma de fuego y que al asomarse alcanzaron a ver que los agresores fueron dos sujetos que portaban capuchas que cubrían sus cabezas, los cuales huyeron del lugar y dejaron sin vida, tirado, a Velázquez Hernández, por lo que dieron aviso a las autoridades.
En el lugar no fue encontrado ningún casquillo percutido, por lo que se presume que los homicidas habrían utilizado un arma tipo revólver.
Además, las autoridades indicaron que el posible móvil del asesinato podría ser las rivalidades entre las pandillas, pues los agresores de Velázquez Hernández fueron identificados como integrantes del grupo llamado Los Molinos.
Agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado realizan las indagatorias pertinentes.
Un muerto más en El Salto
Por otro lado, el municipio de El Salto volvió a dar de qué hablar, ya que por la noche del lunes, un par de trabajadores de una obra en construcción, encontraron un cadáver de un hombre sin vida, enfrente de la empresa Urrea, cerca de las vías del ferrocarril sobre la carretera El Salto, vía La Alameda.
El reporte lo hicieron alrededor de las 22:30 horas después de toparse con él, cuando caminaban de regreso a su casa.
El cuerpo estaba semidesnudo, envuelto en bolsas de plástico y evidenciaba signos de violencia. En el pecho portaba un mensaje.