La guerra entre bandas de la delincuencia organizada sumó 14 muertos más al registrarse una nueva jornada de violencia en el Guerrero, durante las cuales Acapulco volvió a ser escenario de atentados, enfrentamientos y asesinatos a mansalva, que incrementado el saldo rojo en los últimos dos días a 41 víctimas en la entidad.
De acuerdo con un reporte de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, entre los muertos se encuentran nueve presuntos sicarios, una mujer, abatida por balas perdidas, tres narcomenudistas y un hombre descuartizado.
Durante la refriega entre los grupos de la delincuencia organizada fueron abandonados nueve vehículos, armas largas y cortas de diversos calibres.
Información del diario Milenio establece que todo comenzó al filo de las 3:30 de la madrugada, cuando en la calle La Nao esquina con Limatambo, en el fraccionamiento El Morro, un comando de al menos 30 sicarios llegaron al lugar donde cuatro hombres bebían cervezas y consumían droga y los acribillaron. En el lugar quedaron tres cuerpos ya que uno, que fue identificado por los vecinos como Emanuel alias “El Copete”, fue recogido por sus familiares; testigos también mencionaron que un quinto sujeto fue levantado por el comando armado.
Poco después, sobre la avenida Farallón, una camioneta de lujo blanca fue abandonada obstruyendo uno de los carriles.
Casi a la misma hora se reportaron dos residencias rafagueadas; una en el fraccionamiento Hornos Insurgentes donde los sicarios dispararon armas de alto poder hasta en 60 ocasiones en el portón y la fachada de la propiedad de Jaime Cabañas; el otro atentado fue en una casa de la esquina de Baja California y Michoacán, de la colonia Progreso.
Al filo de las 5:45 de la mañana, un convoy de al menos 15 camionetas con sicarios vestidos de playera negra con logotipos de la PGR y chalecos portacargadores, pasó por el maxitúnel de cuota sin pagar para enfilarse al bulevar Vicente Guerrero; a la altura del entronque con el bulevar Circuito Interior de la colonia Ciudad Renacimiento, afuera de un centro comercial, eran esperado por un comando contrario y se produjo una balacera que duró al menos 30 minutos.
En el lugar quedaron siete vehículos entre camionetas y autos de lujo, la mayoría sin placas y otros con matrículas del Distrito Federal con siete hombres muertos, uno de ellos que no iba uniformado quedó debajo de un puente peatonal; algunos de los policías lo identificaron como un agente de la Policía Investigadora Ministerial de Guerrero, de apellido Duque.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado informó que policías estatales, federales y municipales encontraron a la altura de la colonia La Venta, El Quemado y Arroyo Seco, sobre la carretera federal, los cuerpos de cuatro personas asesinadas a balazos y 9 vehículos abandonados.
En el interior de vehículo Bora, con placas del Distrito Federal, que quedó abandonado durante la balacera, fue encontrado en su interior el cuerpo de un sujeto sin vida. En una camioneta Honda quedaron los cuerpos de tres individuos más, así como tres fusiles de calibre AK-47.
En una camioneta X -Trail, abandonada estaba el cuerpo de una persona del sexo masculino.
También fueron abandonadas, una camioneta tipo Cheyenne color blanca; una camioneta Patriot, color café; un vehículo Accord, color verde, con placas del Distrito Federal, además de una camioneta Eco Sport, color roja, en cuyo interior se localizaron 5 cargadores abastecidos para fusil AK-47.
Dos camionetas Patriot una de color blanca, y la otra de color vino, también fueron encontradas y en el interior de cada una había una maleta color negra, de la cual se ignora su contenido.
Durante el enfrentamiento a tiros, resultó muerta por un impacto de bala a la altura de la cabeza, Miríam Sánchez Manjarrez, de 23 años de edad, la cual transitaba a bordo de un taxi del servicio público con el número 30.
Mientras tanto, en la calle Cuauhtémoc, a la altura de la colonia Garita, fueron depositadas ocho partes de un hombre descuartizado; una pierna la dejaron debajo de un puente peatonal y el resto de los miembros, entre los que se encontraba la cabeza, fueron depositadas en las escalinatas de la iglesia del lugar, donde ya se oficiaba la primer misa de este domingo.
En todos los sitios hizo presencia el Ejército. En la balacera del bulevar Vicente Guerrero detuvieron a dos jóvenes que hablaban por teléfono en actitud sospechosa y los subieron a un vehículo artillado.
(Con información de Milenio y El Universal)
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