Horas después de ser secuestrados en su domicilio por un grupo armado durante la madrugada, en Escobedo, Nuevo León, dos ex militares fueron liberados con huellas de golpes, sobre el Libramiento Noroeste, cerca de la Casa del Arraigo.
Inicialmente, personal del Ejército Mexicano y de la Agencia Estatal de Investigaciones acudió a la Colonia Las Encinas luego de reportarse la desaparición de ambos hombres, donde un familiar de las víctimas indicó que durante la madrugada, alrededor de las 5:00 horas, un grupo armado arribó hasta su domicilio ubicado en las calles de Álamo y Puebla para llevárselos por la fuerza.
Cuatro horas y media después, las autoridades reportaron que ambos ex militares habían sido localizados, y sólo presentaban huellas de golpes en el cuerpo.
Las víctimas fueron identificadas como Cuauhtémoc Casaus Castillo y Enrique Casaus; éste último ostentaba el grado de teniente antes de su retiro del Ejército.
Al inicio de la investigación, la vialidad en algunas calles de la colonia Las Encinas fue cerrada por militares que se encargaron de resguardar la seguridad del personal que se encontraba en las oficinas cercanas.
Tras ser liberados, los afectados fueron llevados ante las autoridades para que declaren en torno al secuestro del que fueron víctimas.
Siguen los “daños colaterales”
Un hombre que esperaba el camión para ir a trabajar, fue víctima de las balas de delincuentes que en ese momento pasaron por el lugar en una persecución de dos bandos contrarios, que intercambiaban tiros de armas de grueso calibre. La policía llegó minutos después sólo para acordonar la zona y evitar que los alumnos de una escuela cercana llegaran a la misma y fueran regresados a sus casas.
La persecución y balacera ocurrió en los sectores Contry y San Ángel Sur y de acuerdo con versiones de testigos, los ocupantes de varios autos y camionetas circulaban a gran velocidad y tiroteándose sobre la Avenida Paseo de las Américas hasta llegar a San Ángel Sur.
En el lugar y frente a una escuela fue alcanzado por las balas de los delincuentes Antonio Cortez Morales, de 58 años, quien esperaba el camión para ir a su trabajo. Herido trató de llegar a su domicilio desde la Avenida San Ángel hasta el cruce de López Mateos y Privada Valle Hermoso con la intención pero ya no pudo y ahí fue auxiliado por paramédicos de la Cruz Verde. Una bala le atravesó el antebrazo izquierdo.
Minutos después, al sitio llegaron elementos ministeriales y del Grupo de Reacción Inmediata, quienes observaron varios casquillos de arma de alto poder sobre la Avenida San Ángel.
Ante el temor por la balacera, los alumnos de una escuela primaria que se ubica en la entrada de la colonia fueron enviados a sus domicilios por los maestros del plantel.
El llamado a la Cruz Verde de Monterrey fue hecho a las 7:40 horas para que acudieran a auxiliar al lesionado, pero el reporte de la balacera en las redes sociales surgió desde 20 minutos antes.
(Con información de El Norte)
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