Temor entre habitantes de la frontera tamaulipeca, por alertas de violencia

La intranquilidad, la psicosis, el temor, han invadido a los tamaulipecos, mientras las organizaciones criminales hacen su papel con un aparente llamado a la tranquilidad, pese a las supuestas amenazas que ha habido a través de las redes sociales, en las que se advierten de posibles balaceras en esa entidad, que han provocado una serie de rumores, no comprobados, de enfrentamientos, por ejemplo en Nuevo Laredo, de los que no hay registro y uno real la noche de este sábado en la ciudad de Matamoros.

Al filo de las 17.00 horas comenzaron a aparecer en puentes peatonales de las principales avenidas mantas en las que presuntamente el Cartel del Golfo pide a la ciudadanía seguir su vida normal y les asegura que:

"Reynosa es una ciudad segura. No pasa nada ni pasará nada. Sigan su vida normal. Nosotros somos parte de Tamaulipas y no nos metemos con los ciudadanos civiles. Atte: C.D.G".

Entre semana, redes sociales en internet difundieron mensajes advirtiendo que iban a ocurrir el jueves o mañana balaceras históricas en Reynosa.

Hasta la mañana de este sábado nada de ello había sucedido, pero ya por la tarde las cosas cambiaron.

En Matamoros se dio un enfrentamiento entre militares y delincuentes, mismo que dejó como saldo a dos personas ajenas a los hechos, a una muerta y a otro herida, lo peor es que se trata de un joven estudiante de una escuela privada y un menor de edad que su delito fue estar en una parada de camión, por donde pasaron los tiros de bala de ambos bandos.

ya la psicosis había provocado que los padres sacaran desde el jueves a sus hijos de las escuelas y pocos niños asistieron a los colegios el viernes. Además, miles de reynosenses han cruzado a Estados Unidos en busca de un refugio temporal ante el temor, pero la ciudad ha lucido tranquila.

Sin embargo, las cosas han extrapolado las fronteras y ello provocó incluso que dos de los puentes internacionales entre Matamoros y Brownsville fueran cerrados el día de hoy por espacio de más de una hora, como consecuencia de amenazas de bomba recibidas en el lado americano; esto provocó una gran fila de autos que esperaban para cruzar hacía el lado americano.

Martín Reyna vocero del Departamento de Aduanas y Protección fronteriza confirmó que el puente “Brownsville y Matamoros” fue cerrado a la circulación a partir de las 10:18 horas de este día mientras que el cierre “Ignacio Zaragoza” se dio a partir de las 10:30 horas poco después de recibir las llamadas telefónicas anónimas alertando sobre algún artefacto explosivo.

Personal de la dependencia realizó una exhaustiva inspección en todo el cuerpo del puente pero que no se detectó nada irregular. Lo mismo sucedió en el lado mexicano en donde elementos de La Marina, de Bomberos y de Protección Civil, hicieron lo propio, sin que se detectara artefacto alguno, por lo que se mantuvieron a la expectativa.

Poco después de las 11:00 horas se reabrió al paso de automovilistas y peatones.

Al mismo tiempo, alrededor de unas ochenta personas bloquearon  la carretera Valle Hermoso-Puente Internacional Libre Comercio, en protesta porque presuntamente marinos de la Armada de México, tenían detenidos a varios de sus familiares los cuales aseguraban que hasta los habían golpeado.

Esto fue alrededor de las 18.00 horas, cuando en la calle Madero y 120, en pleno centro de la ciudad de Matamoros se comenzaron a reunir hombres, mujeres, jóvenes y niños y de ahí, a bordo de varios vehículos, enfilaron a las bodegas abandonadas que se localizan en la 1290, con kilómetro 79, enseguida en donde se construye el Hospital general.

Una de las participantes en la protesta Evelyn Hernández Villalón de la colonia México así como otras mujeres, solicitaban hablar con el jefe de los Marinos  que se encontraban ese lugar, para que les dieran razón de sus familiares que la gente aseguraba los tenían allí.

Los marinos invitaron a las personas que si querían reclamar algo que se fueran a sus instalaciones en la ciudad de Matamoros y que allá les darían razón de lo anterior y que ellos no tenían a nadie detenido mucho menos golpeado.

El grupo de personas lejos de retirarse del lugar optó por bloquear la carretera que duró hasta las ocho de la noche ya que largas filas de vehículos que querían entrar a la ciudad no se podía ni tampoco salir de Valle Hermoso.

Las filas de vehículos eran de tres a cuatro kilómetros y las personas comenzaban a lanzar gritos a los miembros de la Marina, quienes en dos ocasiones apuntaron sus armas contra los manifestantes y pidieron a la gente y reporteros se retiraran del lugar, mientras los automovilistas querían llegar a  su destino.