Titular de la SSP de Santiago, al Cereso de Apodaca por nexos con la delincuencia

Luego de 22 días de arraigo, el Secretario de Seguridad Pública y Vialidad de Santiago, Nuevo León, Francisco Javier Villarreal Flores, de 47 años, el comandante Alejandro Salazar Zamarrón, de 31, y el policía José David Herrera Facio, de 55, a quienes detuvieron el Ejército y la Agencia Estatal de Investigaciones el pasado 16 de septiembre, por presuntos nexos con la delincuencia organizada, fueron internados en el Cereso de Apodaca.

El titular de la Policía y Tránsito de Santiago aceptó haber recibido del grupo delincuencial de Los Zetas 4 pagos por 15 mil pesos cada uno, y el comandante entre 3 y 4 mil pesos en un año, por informar de las acciones militares en la zona, según una fuente allegada al caso.

Villarreal Flores y Salazar Zamarrón fueron internados en la Casa del Arraigo No. 2 de Escobedo el 18 de septiembre y dos días después ingresaron también para su investigación a Herrera Facio por los mismos delitos.

Después de haber permanecido arraigados por más de 22 días, anoche fueron notificados de una orden de aprehensión girada por el Juzgado Segundo de lo Penal del Primer Distrito Judicial en el Estado, por los delitos de Cohecho y Delincuencia Organizada, por lo que fueron trasladados al penal de Apodaca.

No pudo y renuncia

Por su parte, Héctor Santos Saucedo renunció ayer al cargo de director de la Agencia Estatal de Investigaciones por presuntos motivos personales, aunque reconoció "situaciones de corrupción y de infiltración" en la Policía Ministerial, que no pudo respaldar con pruebas y por tanto denunciar ante las autoridades competentes, según dijo.

Explicó que deja “una corporación sólida, estable"…, con situaciones de corrupción y de infiltración, eso sí lo acepto, infiltración de la delincuencia organizada. Desgraciadamente hay temas y casos en que no puedes probar ni puedes asegurarle a la gente (el delito).

Santos aseguró que, desde que ingresó a la corporación el 13 de octubre del 2006, la depuró constantemente, por lo que fueron dados de baja más de 150 agentes, algunos de los cuales están en la cárcel.

Con su renuncia, queda como encargado del despacho, de manera interina, Miguel Ángel Rivera López, quien era responsable del área de despliegue policial de la corporación.