Un método para el tráfico de estupefacientes que había quedado en desuso, es de utilizar las prendas de vestir para tratar de introducir drogas, como heroína, cocaína y ahora seudoefredrina, ya sea el forma de almidón, o en pequeñas bolsas que se crean a todo lo largo de sacos o pantalones de vestir, que difícilmente son detectados por los rayos de las máquinas de rayos x.
Sin embargo, para los efectivos de la Policía Federal Preventiva que resguardan las bandas de la 8 a la 10 en la zona denominada como de alto riesgo, han aprendido a vislumbrar estos intentos del narcotráfico, por la simple razón de que generalmente se trata de viajes cortos, de personas de origen latino, que transportan cantidades de ropa inusuales, casi siempre sacos y pantalones.
Este el caso del aseguramiento que los federales realizaron en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, un sujeto que fue identificado como José Ignacio Galindo Salinas, quien llegó con una maleta en la que traía 79 prendas de vestir, todas ellas almidonadas con seudoefedrina, un reactivo utilizado para la elaboración de anfetaminas o cocaína.
Este individuo que hace las veces de \”burro\”, y que generalmente reciben una paga de no más de 10 mil por el transporte de la droga , llegó procedente de Buenos Aires, Argentina, donde le fue entregada la maleta que contenía 33 pantalones y 46 camisas.
El problema fue que la ropa aún venía húmeda, era un número poco usual para un viaje de esta índole, por lo que al revisar la maleta, los policías sospecharon de la existencia de la seudoefedrina, lo que se pudo constatar una vez en las oficinas de la corporación en la misma terminal aérea.
De acuerdo con informes de la Procuraduría General de la República, la maleta pertenecía al pasajero que fue identificado con el nombre José Ignacio Galindo Salinas, quien tenía como destino final la ciudad de Guadalajara, Jalisco.
Este método para tráfico de estupefacientes de reactiva a sólo dos días después de que en alta mar la Armada de México interceptó un minisubmarino con casi seis toneladas de cocaína.
(Con información de El Universal)