Es el Rolls-Royce más viejo del mundo, y desde ahora el más caro, ya que un coleccionista privado británico pagó más de 3.5 millones de libras (unos 7 millones de dólares) para hacerse de este vehÃculo que cumple 103 años de existencia; fue fabricado en 1904.
Este \”Rolls\”, considerado como \”el coche más romántico del mundo\” ha batido dos récords mundiales: duplicó el precio más alto pagado nunca en una subasta por un vehÃculo veterano -fabricado antes de 1905-, que ostentaba un De Dio Bouton de 1884 adjudicado por 1.76 millones de libras (unos 3.6 millones de dólares).
Y se ha convertido en el Rolls-Royce más caro vendido en una puja, al arrebatarle el tÃtulo a otro fabricado en 1912 por el que se pagó 1.48 millones de libras (unos 3 millones de dólares), además de superar con creces las expectativas más optimistas de la casa de subastas Bonhams de Londres, que estimaba apenas superar el millón de libras por su venta
Durante la puja, celebrada en la sala Olympia de Londres, la sala se vio interrumpida por un estruendoso aplauso cuando se informó que este vehÃculo de diez caballos de potencia, fue fabricado el mismo año en el que Frederick Henry Royce y Charles Stewart Rolls decidieron en una reunión en Manchester comercializar sus vehÃculos con la icónica marca, se quedarÃa en el Reino Unido.
Los aplausos han seguido a varios minutos de silencio sepulcral mientras el precio iba escalando a golpe de puja de cinco potenciales compradores, dos en sala y tres por teléfono, y ante la mirada atónita de los asistentes.
El vehÃculo, el cuarto en fabricarse con la famosa marca británica, es un biplaza descapotable de color azul oscuro y adornos en dorado, con carrocerÃa de madera y asientos tapizados en piel roja que está en perfectas condiciones de uso.
Incluso su actual propietario, un británico que ha tenido este veterano Rolls en su poder durante los últimos treinta años, participó con él hace sólo tres años en la tradicional carrera de vehÃculos antiguos que cada noviembre une Londres y Brighton.
Diseñado como vehÃculo de exhibición, fue mostrado a finales de otoño de 1904 en el Salón de ParÃs y al año siguiente en la sala Olympia de Londres, precisamente donde hoy fue subastado.
Los archivos de la compañÃa británica permiten conocer que el vehÃculo fue propiedad en 1905 durante un corto periodo de tiempo, quizás en prueba, de un tal doctor Briggs.
Después pasó a manos de un escocés llamado Kenneth Gillies y más tarde fue adquirido por Percy Binns, del condado de Yorkshire (norte de Inglaterra).
En 1950 fue descubierto precisamente en ese condado, en un estado lamentable y con la carrocerÃa modificada, y fue Oliver Langton, un entusiasta corredor de motos, el que lo restauró meticulosamente para que pudiera echar a andar de nuevo.
Vendido a su actual propietario en 1977, éste lo ha usado de forma habitual, pero ahora que no puede seguir conduciéndolo ha decidido ponerlo a la venta.
Este veterano \”Rolls\” ha sido la estrella de una subasta dedicada a joyas del motor en la que se han ofrecido al mejor postor un centenar de vehÃculos, entre ellos el Buick que trasladó a Eduardo VIII hasta el 10 de Downing Street para comunicar su decisión de abdicar.
El monarca renunció al trono británico a los pocos meses de ser coronado al negarse a renunciar a su boda con la divorciada estadounidense Wallis Simpson.
Con esa historia sobre sus ruedas, Bonhams no ha dudado en bautizarlo como \”el coche más romántico del mundo\”